Páginas

miércoles, 18 de julio de 2012

“El día de la bestia” de Alex de la Iglesia

La cinta, que se presume, inaugura el género de la "Comedia satánica", es en todos los casos, extravagante.

Fausto Carámbura*

Alex de la Iglesia (Bilbao, España; 1965).
"Padre, quiero confesarme. No he pecado, pero voy a pecar: voy a hacer todo el mal que pueda, porque es necesario. Lo he descubierto, he descifrado la clave…". De esta manera es como el director, Alex de la Iglesia (Bilbao, España; 1965) da inicio a la cinta "El día de la bestia" (1995), la cual se consagra como una de las mejores cintas ibéricas de acción/terror de la época, tras haber obtenido, además de otros premios, el Premio Goya al mejor director.

La película, que se presume, inaugura el género de la "Comedia satánica", es en todos los casos, extravagante. Su humor negro vislumbra y arrebata los severos cánones que presiden a la Iglesia. La parodia, la ultraja y la desmiembra. El sólo hecho de aseverar la destrucción del mundo por el anticristo, advierte una gran embestida de la fe de los creyentes desde una raíz social muy profunda.

En “El día de la bestia”, el sacerdote Ángel Berriatúa, quien es además catedrático de Teología en Madrid, tiene que acostumbrarse a hacer el mal porque quiere ponerse en contacto con Satanás para impedir su advenimiento. Tras haber descifrado, después de 25 años, que el Apocalipsis según San Juan no es más que un criptograma, un mensaje en clave que marca el 25 de diciembre de 1995 como el día exacto del nacimiento del hijo de Satán y en consecuencia el fin del mundo, intenta averiguar el lugar exacto del nacimiento para detenerlo.

En lo personal, a pesar de ser su segundo largometraje, Alex de la Iglesia realiza un gran trabajo cinematográfico, sus diálogos son precisos, ácidos y categóricos y proyectan, contrario a los fundamentos lineales de las creencias religiosas, la realidad exacerbada que se vive día con día y la manipulación televisiva de las masas por la culpa, la duda y la ignorancia. Además alcanza en su desarrollo, un fondo sombrío y sin embargo original donde los tres personajes principales: el sacerdote Ángel Berriatúa (el mentecato), el metalero José María (el tonto) y el profesor de las ciencias ocultas “Caván” (el embustero) parecen formar una unidad casi increíble y venerable.

Los efectos especiales, contrario a lo anterior, carecen de verosimilitud. El gusto por De la Iglesia fue el correcto más no el mejor. Intentó preservar el matiz natural en cada una de las escenas, sin embargo, en su mayoría eran excedidas o demasiado dramatizadas o demasiado evidentes, incluso en las tomas menos complicadas.

“El día de la bestia” es una película interesante, llena de acción y suspenso; incomoda para algunos y reverente para otros. Digna de verla de principio a fin. 


Ficha técnica:

Título original: El día de la bestia.
Año: 1995.
País: España.
Director: Alex de la Iglesia
Guión: Álex de la Iglesia y Jorge Guericaechevarría
Música: Battista Lena
Fotografía: Flavio Martínez Labiano
Duración: 103 minutos.



No hay comentarios: